
Son 1.500 del micro y macrocentro. Por allí circulan 750.000 autos, un 50% más que hace cinco años. Si bien el plan debía arrancar esta semana, en la Comuna dicen que aún no pueden implementarlo porque falta terminar la cartelería.
En los próximos días, desaparecerán 1.500 parquímetros de veinte calles del micro y macrocentro porteño. La medida, que forma parte del plan de Tránsito lanzado por Mauricio Macri, se confirmó con la publicación en el Boletín Oficial de una resolución firmada por el subsecretario de Transporte, Eduardo Moreno. Esta resolución prohíbe estacionar en una serie de arterias, incluyendo tramos de Arenales, Ayacucho, Lavalle, Rodríguez Peña, Defensa, Perón y avenida Belgrano, entre otras. Aunque por ahora se trata de una prueba: la norma aclara que la prohibición regirá en forma transitoria y experimental por un plazo de 90 días a partir de su entrada en vigencia.
La eliminación de parquímetros es una de las tres medidas previstas por el Gobierno porteño para priorizar al peatón y desalentar el ingreso de autos a la Ciudad. Las otras consisten en construir treinta nuevas playas de estacionamiento y aumentar el precio del peaje en las horas pico.
En cuanto al estacionamiento medido, concesionado a las empresas BRD y Dakota (ver El contrato...), el plan pretende reducir en un 25% los parquímetros en el micro y macrocentro. Según se anunció, los parquímetros que se sacarán son los ubicados en las calles más congestionadas. El objetivo es reformular la distribución de la oferta de estacionamiento en la vía pública y mejorar la circulación del tránsito. Pero también, según se aclara en la resolución, se pretende liberar la calzada para otros usos, como facilitar la circulación de vehículos de transporte de pasajeros o la determinación de nuevos sectores para la carga y descarga de mercaderías.
Sin embargo, aún no hay una fecha concreta para la entrada en vigencia de la medida. "La misma norma dispone que, antes de su implementación, hace falta que la Dirección General de Tránsito instale la señalización vial correspondiente en las calles afectadas. Además, ordena que esa misma Dirección dicte una disposición fijando la fecha y la hora en que empezará a regir la prohibición de estacionar", explicaron fuentes del Ministerio de Desarrollo Urbano de la Ciudad.
El problema es que, a pesar de que la intención oficial era eliminar los parquímetros para el 1° de julio, todavía está demorada la cartelería que hay que instalar para orientar a los automovilistas.
Los usuarios de los parquímetros consultados por Clarín en algunas de las calles afectadas se manifestaron en contra de la inminente prohibición de estacionar. La mayoría argumentó que es cada vez más difícil encontrar lugares para dejar el auto y que las playas cobran tarifas muy elevadas (ver El lugar...).
Los números son elocuentes: según la Asociación de Garajes y Estacionamientos, desde 2004 desaparecieron 756 garajes, lo que le restó a la Ciudad 150.000 cocheras. Apenas quedan 2.500 garajes para toda la Capital y algunos cobran tarifas que superan los $ 7 por hora. Mientras, estacionar una hora en un parquímetro cuesta apenas un peso.
Al mismo tiempo, el tránsito en la Ciudad de Buenos Aires está colapsado y ya no hay lugar para más autos. Según los cálculos oficiales, cada día ingresan a la Ciudad 1.300.000 vehículos, que se suman a los 500.000 que conforman el parque automotor porteño. Y, según se afirmó en la presentación del plan para reordenar el tránsito, 750.000 de esos autos entran en el macro y microcentro, una cifra que supera en un 50% a la de hace cinco años.
Además de desalentar el uso del auto particular, el nuevo plan apunta a priorizar el transporte público y a incrementar los controles de tránsito. Para eso se lanzó un paquete de medidas que incluyen el regreso de las fotomultas, el aumento de los carriles exclusivos para colectivos y la contratación de mil nuevos agentes para el Cuerpo de Control de Tránsito. También se eliminará la mitad de las paradas de colectivos del macrocentro, que estarán cada cuatro cuadras en vez de cada dos.
Fuente: Diario Clarín del 4 de julio de 2008